En cuanto al diseño, el Dragonship 80 ofrece cinco niveles de puro lujo que podrán acomodar a 12 invitados en el cuerpo principal del trimarán, más un espectacular camarote con vestíbulo y balcón privados para sus propietarios. En ese mismo cuerpo de la embarcación se encuentra el camarote del capitán, que es el único miembro de la tripulación alojado en esa estructura, ya que los 17 miembros restantes tendrán instalaciones ubicadas en los cuerpos laterales y secundarios de la nave, aprovechando al máximo los espacios disponibles en el diseño.
El cuerpo central del Dragón también contará con un comedor y lujosos espacios de estar con generosas vistas al océano, además de diversas terrazas solárium, un spa y un completísimo gimnasio. En su nivel superior, se destaca un soberbio mirador con su propio bar, jacuzzi y área de solárium, el cual podrá ser cubierto con un sistema de toldos automáticos.
Para aprovechar al máximo los espacios, los juguetes acuáticos —como las moto de agua y los chinchorros o embarcaciones complementarias— estarán alojados en los cuerpos laterales. Y una de las novedades más interesantes de la propuesta es que para poder acceder a las marinas convencionales, los cuerpos laterales de flotación del trimarán podrán ser plegados disminuyendo la medida de manga de la embarcación de 30 (98 pies) a 25 metros (82 pies).
Este Dragón de los mares aún no tiene precio, pero seguro que ya ha despertado la atención de más de un amante de la navegación deportiva por su impresionante sistema de propulsión a vela. Habrá que esperar para saber cuánto costará poseer el velero del futuro. ■