Para aquellos que disfrutan de las montañas, el esquí ha sido siempre uno de los deportes más placenteros. En los Estados Unidos y en Canadá hay varios complejos turísticos que cuentan con acceso a las mejores pistas para practicar este tipo de deporte, pero no todos cuentan con servicio de valet de esquís. Solamente los establecimientos hoteleros más exclusivos ofrecen servicio de valet en las pistas, lo que evita la carga de los pesados equipos, algo esencial si uno no se aloja en apartamentos con acceso directo a las pistas.

En la zona de Nueva Inglaterra, en los Estados Unidos, el Stowe Mountain Lodge está situado en un entorno encantador. Este lujoso refugio de montaña de 312 habitaciones, ubicado en el pueblo alpino de Stowe, incluye entre sus facilidades el Alpine Concierge, programa de servicio y atención personalizada al cliente entre cuyas prestaciones incorpora el valet de esquí, que permite a los huéspedes la comodidad de enviar su equipo de esquí por adelantado a las pistas, donde el personal del hotel se encargará de tenerlo preparado para su uso, lo que incluye también el calentamiento de las botas. El refugio cuenta además con acceso directo a rutas de ciclismo y alpinismo.

Mont Tremblant, Quebec.

Ya en Canadá, esquiar en Mont Tremblant, Quebec, a tan sólo una hora de Montreal, supone disfrutar de sus más de 600 hectáreas en una de las montañas más bellas de Norteamérica: los Montes Laurentinos. Mont Tremblant, «La Montaña que Tiembla», en francés original, con una altura de 875 metros y 95 pistas de todos los niveles, tiene la capacidad de transportar a más de 27.000 esquiadores por hora gracias a sus 14 remontes. En el servicio de valet de esquí también está incluida la visita a la villa, de estilo europeo, cuyo disfrute, junto con su oferta gastronómica es una opción más de ocio.

Stowe Mountain Resort.

Siguiendo el recorrido de los establecimientos que mejor atienden las necesidades de los que esquiadores, nos detendremos en Vail, localidad ubicada en Colorado, Estados Unidos, y una de las preferidas para los deportes de invierno. Cuando Vail abrió sus puertas, en el invierno de 1962-1963, cada ticket costaba $5 y únicamente unas 12 personas al día disfrutaban de las pistas. Para el invierno de 2013-2014, se espera que se sobrepasen los 1.8 millones de visitas, que ya podrán disfrutar de las nuevas cabinas para transportar a los esquiadores a las pistas, con capacidad para 10 personas y equipadas con asientos provistos de calefacción y wi-fi. Los esquiadores, con seguridad, apreciarán este invierno la reanudación del servicio de valet de esquís ofrecido la temporada pasada por el Ritz-Carlton, que no sólo calienta las botas de esquí, sino que se ocupa del traslado del equipo al inicio y al final del día, así como de realizar el secado del mismo. El Four Seasons Residence Club es otro de los hoteles de Vail que ofrece a sus huéspedes estas mismas prestaciones.

1. Vail Ritz-Carlton.
2. Vail.
3. The Four Seasons Residence Club

Aspen no puede faltar en la lista de los mejores lugares para esquiar en Norteamérica. A esta lujosa localidad de esquí, situada también en Colorado, acuden todos los años deportistas y aficionados del mundo entero. Como no podía ser menos, el Ritz Carlton Club ofrece también la posibilidad de servicio de valet de esquís, algo que han añadido posteriormente otros hoteles y residencias de apartamentos de la zona.

Hay otros hoteles y complejos turísticos, tanto en los Estados Unidos como en Canadá, que llevan años ofreciendo a sus huéspedes este servicio del que venimos hablando. Es el caso del Stein Eriksen Lodge, que lleva más de 30 años ofreciendo estas facilidades a sus clientes. Situado en Deer Valley, Utah, y a tan sólo 45 minutos de aeropuerto internacional de Salt Lake City, no sólo se ocupa del traslado y mantenimiento del equipo, sino también de la ayuda y la asistencia para su colocación. Park City, también en Deer Valley, es otra de las localidades americanas que dan acceso a valet de esquíes, un servicio personalizado y profesional del que muchos esquiadores ya no podrían prescindir. ■