Su cabello rojo atrae inmediatamente la atención, lo mismo que sus creaciones gourmet, tan extravagantes como deliciosas. Ahora, la célebre y carismática chef Adrianne Calvo deslumbra a los comensales en su restaurante de cinco estrellas de Miami con aperitivos, entrantes y postres que brillan —literalmente— con oro de 24 quilates. Otras mujeres que triunfan en el mundo de la alta cocina: Carme Ruscalleda, Michelle Bernstein, Leo Espinosa y Cindy Hutson.

Chef Adrianne Calvo.

Esta joven chef nacida en Chicago y de padres cubanos, propietaria de Chef Adrianne’s Vineyard Restaurant and Wine Bar, inaugurado en el 2007, se ha creado una impresionante reputación en la escena culinaria del sur de Florida y ha hecho de su nombre un sinónimo de excelencia. Autora de dos libros de cocina y merecedora de múltiples premios, la chef de 28 años de edad se enorgullece de ser una inconformista culinaria, siempre al acecho de inusitados colores, sabores y texturas con los que sorprender los paladares de su clientela.

Chef Adrianne’s Vineyard Restaurant and Wine Bar.

Sin duda, la chef Adrianne ha ganado prestigio y notoriedad por sus propuestas desafiantes y su desbordante imaginación. Sin embargo, su decisión de espolvorear oro en sus provocativos platos va más lejos que el simple hecho de causar placer para los ojos. “El oro siempre ha sido considerado como un mineral con propiedades medicinales y curativas”, señala la empresaria y maestra cocinera. “Se ha utilizado durante siglos contra la inflamación de las articulaciones y la artritis, en el tratamiento de trastornos de la piel y para mejorar la salud y el bienestar general, por lo que parecía un ingrediente perfecto para usarlo en mis recetas y añadirlo a mis platos”.

Una vez al mes, la chef Adrianne hace del oro el protagonista de sus creaciones temáticas durante las cenas a oscuras (Dark Dining) que lleva a cabo en su restaurante del suroeste de Miami, un evento de dos horas donde los comensales agudizan sus sentidos mientras disfrutan de una cena gourmet con los ojos vendados.

Dark Dining.

“Poco a poco iremos incorporando el oro en nuestras cenas especiales para que un mayor número de nuestros comensales puedan disfrutar de la experiencia sin los ojos vendados”, explica la chef Adrianne, quien ha trabajado el precioso metal en platos como el Steak tartar, las pastas y algunos postres. “Lo hemos espolvoreado sobre la berza o col rizada al preparar nuestra ensalada Super Green. Con un ingrediente como el oro, las posibilidades son infinitas”. ■